

Megaesófago en Perros
Información clara y apoyo real
¿Tu perro regurgita la comida sin digerir?
¿Pierde peso aunque come con normalidad?
¿Has notado tos o dificultad al respirar después de alimentarse?
​
Podrían ser signos de megaesófago, una condición que afecta al esófago y que muchos dueños desconocen hasta que reciben un diagnóstico veterinario.
En Mega-Dog sabemos lo que significa enfrentarse a este problema, porque nosotros también lo vivimos con nuestro perro Dark. Por eso hemos creado este espacio: para ofrecerte información fiable, consejos prácticos y apoyo cercano.
No estás solo, y tu perro puede tener
calidad de vida
El megaesófago no tiene cura definitiva, pero con los cuidados adecuados, los perros pueden llevar una vida feliz.
Aquí encontrarás:
​
-
Síntomas y diagnóstico: cómo reconocerlos y qué pruebas pedir al veterinario.
-
Tratamiento y cuidados: desde la alimentación adaptada hasta la importancia de la silla Bailey.
-
Recursos prácticos: guías descargables, vídeos, checklist de cuidados.
-
Testimonios reales: familias que han aprendido a convivir con esta condición.
EMPIEZA AQUÍ

Nuestra historia
Todo empezó con Dark, un schnauzer miniatura que un día comenzó a regurgitar la comida. Tras muchas pruebas y dudas, el diagnóstico fue claro: megaesófago adquirido. Fue un camino de aprendizaje, de errores y aciertos, que hoy compartimos contigo para que no tengas que empezar de cero.
Aviso Importante
La información publicada en esta página web se basa en nuestra experiencia personal con perros con megaesófago y en fuentes disponibles públicamente en internet. En ningún caso pretende sustituir el diagnóstico, tratamiento o asesoramiento profesional de un veterinario o especialista en salud animal. Recomendamos siempre consultar con un profesional cualificado ante cualquier duda o situación relacionada con la salud de tu perro.